Cada clase, un encuentro mágico.

Parece increíble el clima que experimentamos en cada encuentro. Cada clase que hemos dictado hasta hoy, tiene su encanto y singularidad. Hemos compartido con mujeres maravillosas, momentos de creatividad, de charlas interminables y hasta de silencios cómplices. Hemos disfrutado juntas de la posibilidad de crear y bordar con nuestras propias manos. El espacio está abierto, las ganas y el compromiso de enseñarles también. Las esperamos con gusto!